Soy la fundadora de Sanando entre Letras, ofreciendo servicios de Lectura Beta para escritoras de romance, historias de amor y ficción. La idea permaneció cinco años escondida, en una pequeña libreta blanca, desde la pandemia hasta que decidí ir por todas. ​

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Crecí con lecturas románticas, de esas que te hacen perder la parada del tren, que causan mariposas y sonrisas. Historias que me hicieron cerrar el libro, tomar unos segundos para gritar, llorar, respirar… y luego continuar leyendo. Fueron mis primeros encuentros con un amor arrebatador, idealizado, casi etéreo.

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Pero al llegar la adultez, surgieron nuevas preguntas. ¿Cómo se ve el amor romántico en la literatura cuando dejamos de soñar con príncipes y empezamos a buscar vínculos reales, sostenibles, humanos? ¿Desde dónde me acerco hoy, como lectora y escritora a estas historias? ¿Qué narrativa quiero acompañar y qué relatos deseo transformar?

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Como lectora, he visto cómo muchas autoras exploran ahora un amor más complejo. Amor que no siempre es idílico ni perfecto, sino que resiste, duda, se reconstruye. Amor que no solo enamora, sino que revela. Y eso también es bello, necesario y profundamente humano.

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En Sanando entre Letras, mi compromiso es acompañarte en la búsqueda de esa voz que quiere hablar del amor —sea romántico, familiar, propio o ausente— con verdad y sensibilidad. Porque escribir sobre el amor es también una forma de sanar. Y compartir una retroalimentación con respeto y escucha es una forma de cuidarlo.​​